La robotización de la guerra avanza imparable, pero es solo un factor de una RM que terminará con el soldado tradicional.
Opinión

La guerra después de la guerra

La guerra, lo que llamamos «guerra», llega a su fin. Los enjambres de drones y las municiones merodeadoras, los vehículos autónomos sean terrestres, aéreos o marítimos, la inteligencia artificial, la automatización de la logística, los fuegos de largo alcance, todo conspira para que el elemento humano, el sufrido infante, sea superado. Si esto ocurre, si el soldado de a pie pasa a segundo plano, lo que venga seguirá siendo cruel y salvaje, sangriento y económicamente devastador, pero ya no será guerra. Será otra cosa… [Continúa…]

Ministerio de Defensa
Opinión

La pendiente revolución española en los asuntos militares

La historia de España, desde su fundación e incluso antes, ha estado ligada al arte de la guerra. La reconquista llevada a cabo por los reinos peninsulares en la edad media, la forja de un imperio de ultramar y los asuntos europeos, que fueron piedra capital de nuestra política exterior durante tres siglos, terminando por el ansia neocolonial que desangró al país en el norte de África, siempre han mantenido en jaque a la nación y perfectamente engrasada la maquinaria de guerra; plagada a su vez de grandes innovaciones, importantes gestas y sonoros fracasos. De estos últimos, relativamente recientes, y el derrumbe económico y social acaecido durante la revolución industrial, surgió una necesaria política de no intervención, incluida la neutralidad de nuestro país en los dos conflictos mundiales que acabaron por crear la Europa que hoy conocemos, y haciendo calar en la sociedad un acusado pacifismo, vertebrado entorno a las [Continúa…]

Marine americano disparando un fusil M27
Opinión

El nuevo pelotón de fusiles del USMC

El pasado mes de mayo, durante la entrega anual de premios de la “Marine Corps Association and Foundation”, el Comandante General del United States Marine Corps (USMC) Robert B. Neller, informó de una nueva reestructuración en el organigrama de sus pelotones de fusiles, lo cual parece que ha causado bastante revuelo en las filas del Cuerpo. Esta nueva configuración consiste en la reducción de un marine por pelotón, pasándose de los trece actuales a tan sólo doce, y agrupando a su vez a estos doce marines en tres equipos de fuego (o escuadras) de tres soldados, más un cuarto elemento llamado “de mando”, formado por el Jefe de pelotón, un segundo Jefe y un Operador de los sistemas del pelotón. Esta figura del Operador de sistemas ha sido lo que más ha impactado, ya que consiste en un marine que, en lugar de dedicarse a batir por el fuego al [Continúa…]